Equipo de Fútbol femenino gana segundo lugar en campeonato de la DIDER

El pasado jueves 21 de noviembre el equipo de futbol femenino de psicología jugó la final del campeonato organizado por la DIDER (Dirección de deportes y recreación de la PUCV), quedando segundas tras un partido muy peleado con el equipo de Educación Básica.

Las “Pato Chancho”, empezaron a entrenar el año pasado, entre finales de octubre y principios de noviembre, se autodenominaron así ya que siempre entrenan en la cancha de la Facultad de Filosofía y Educación, desde donde se escuchan los pájaros de la Laguna Sausalito que popularmente se conocen con ese nombre: “siempre nos acompañaban en nuestro entrenamiento, nos daban apoyo moral”, dice Bernardita Elizalde, alumna de cuarto año.

“Creo que la experiencia fue increíble y haber vivido una final aún más. En todo el campeonato tratamos de dejar todo en la cancha y hacer lo que mejor sabemos hacer: jugar como una Pato Chancho. Somos un equipo que partió en conversaciones simples de pasillo, con las ganas de jugar y divertirnos. Ver a mi equipo ahora me llena de orgullo ya que realmente partimos desde lo más abajo y con mucho esfuerzo lográbamos planear los entrenamientos mejorando cada día más. Siento que nuestro esfuerzo ha rendido frutos y espero que muchas mujeres más de nuestra carrera se motiven para que lo que hemos logrado no quede simplemente como un lindo recuerdo”, señala Rocío Valdivia Pinares, estudiante de cuarto año de Psicología.

Para Alejandra Calderón el proceso de salir segundas ha sido producto de su esfuerzo y constancia en el entrenamiento. A pesar de eso, cuando empezaron a jugar el campeonato no sabían hasta donde iban a llegar, sólo fueron a participar, aprovechar la experiencia y sacar lo mejor que pudieran sacar. A medida que iban ganando los primeros partidos, se dieron cuenta de que en realidad tenían posibilidades de quedar en los primeros lugares. Tras la obtención del segundo lugar, pasaron a la división de honor, que es la primera división, lo que las tiene muy contentas y orgullosas con el trabajo que están haciendo.

La historia de las «Pato Chancho»

El equipo se conformó por la motivación de un estudiante de psicología, Mauricio Landauro, quien comenzó a averiguar si había interesadas en formar un equipo de futbol femenino de la carrera. Este proceso demoró: “nos costó ponernos de acuerdo en el día en que íbamos a entrenar y realmente empezar a entrenar, pero de ahí, desde noviembre del año pasado hasta ahora no hemos parado, solo ha habido algunas semanas en que no hemos entrenado por cosas fortuitas. Se han ido integrando más compañeras y yo siento que cada vez está más afianzado el equipo, el interés por jugar, el compromiso de llegar todas las semanas, y las ganas igual, hemos ido aprendiendo sobre todo a jugar en equipo”, dice Alejandra Calderón, también alumna de cuarto año.

El equipo es entrenado por dos estudiantes de distintas generaciones, Mauricio Landauro y Pablo Romero, quienes están muy entusiasmados de que el equipo se haya podido conformar, ya que también han sido parte activa de su desarrollo, ayudándolas con ejercicios y técnicas para poder ir mejorando su fútbol: “yo veo en las pato chancho un sello, un emblema, una divisa, como DT me siento orgulloso, es todo y más de lo que se puede esperar”, dice Pablo Romero.

“Hay dos principales razones por las que decidí formar parte de este gran proyecto: las Pato Chancho. Primero, creo que el deporte y la actividad física en general, es la forma de lograr una unión entre el cuerpo y la mente que tanto insistimos separar (y que lamentablemente en la escuela no se hace nada al respecto). La segunda, es que creo que esta es la mejor forma, no solo de unirnos con nosotros mismos, sino con los demás. En la cancha no hay diferencias políticas, de religión, socioeconómicas, en la cancha somos un todo, unido por un interés compartido y donde se rema para un mismo lado”, nos cuenta Bernardita Elizalde, estudiante de cuarto año psicología.